” ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia”
Mateo 23:27.
Para quienes conocemos los trucos del detractor y falso maestro Fernando Mata, no nos sorprende que presuma una “nueva imagen”, y que otra vez, hable de un “nuevo cambio” que, como veremos, dicho cambio es banal y superficial.
En primer lugar, recordemos uno de los varios “cambios” que supuestamente había realizado. He aquí sus propias palabras:
Ya he respondido a toda esta verborrea en una entrada anterior (la puede ver aquí), y hacemos referencia a ella por si usted no se había percatado que este individuo ha hecho una variedad de supuestos “cambios”, que a la postre no son sino falsos. No es la única vez que el detractor presume y hace una gran cantidad de propaganda para hablar de su despertar a un nuevo día lleno de “amor”, “comprensión” y “ternura”. Sin embargo, sabemos que todo es puro circo, puro maquillaje para seguir engañando a sus fanáticos que ciegamente le creen a su nefasta y vergonzosa conducta, la cual está llena de ideas contrarias a la palabra de Dios, como a todo lo que se diga respetuoso y decente.
Este supuesto cambio que el detractor y falso maestro dice haber hecho, es pura hipocresía, porque no se ha arrepentido de sus pecados, ni ha pedido perdón por ellos. He aquí la deuda grande que lleva el detractor y falso maestro Fernando Mata sobre sus espaldas:
- Tiene que arrepentirse por decir que yo borré un documento de mi sitio web.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo borré tal documento por estarme dañando.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo borré ese documento para ocultarlo de la vista de la hermandad.
- Tiene que arrepentirse por participar en la mentira y el engaño de Rogelio Rosales al decir que yo le estafé con 1000 dólares.
- Tiene que arrepentirse por decir que Bill H. Reeves me cortó la comunión por juntarme con Luis Adriano Barros.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo he solapado pecados de acoso sexual e inmoralidad.
- Tiene que arrepentirse por haber murmurado con otros al decir que yo amenacé con llevar a las autoridades civiles a alguien, entrometiéndose y participando así en pecados ajenos.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo he monetizado mis videos.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo gano dinero con su nombre.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo afirmo que el Nuevo Testamento enseña que un no cristiano puede y debe bautizar.
- Tiene que arrepentirse de su sectarismo, al haberse erigido en fundador y cabeza de una secta denominada: “La Única Iglesia Verdadera”(sic).
- Tiene que arrepentirse por promover esa doctrina falsa e incongruente de que, “El Nuevo Testamento enseña que, para la salvación, solamente los cristianos pueden y deben bautizar”.
- Tiene que arrepentirse por predicar un evangelio diferente al que creyó y obedeció en el pasado.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo no quiero debatir con él públicamente, ocultando el hecho de querer debatir la difamación mencionada en el punto 10.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo pagué una página web.
- Tiene que arrepentirse por decir que yo pagué una página web para hablar exclusivamente de él.
- Tiene que arrepentirse de su doble moral, hablando mal y exponiendo al descrédito a una mujer, a una hermana en Cristo.
- Tiene que arrepentirse de haber dicho que su servidor es parte de cierto ecumenismo para atacarlo.
- Tiene que arrepentirse de engañar al decir que me refutó en algo.
- Tiene que arrepentirse de ser contumaz al seguir haciendo falsas acusaciones.
- Tiene que arrepentirse por hacer las obras del diablo.
- Tiene que arrepentirse de habernos acusado falsamente a Luis Adriano Barros, Lorenzo Luévano y Guillermo Álvarez de ser “acosadores”.
- Tiene que arrepentirse de habernos acusado falsamente a Luis Adriano Barros, Lorenzo Luévano y Guillermo Álvarez de ser “estafadores”.
- Tiene que arrepentirse de acusar falsamente a Luis Adriano Barros de “pedofilia” y “violación”, y de que yo solapo tales pecados.
La Biblia dice que “En las muchas palabras no falta pecado; mas el que refrena sus labios es prudente” (Proverbios 10:19), y el detractor ha dicho tantas palabras, ha hecho tantas y graves declaraciones, que el fruto podrido que en nuestra defensa hemos expuesto, no nos sorprende en lo más mínimo; por tanto, y en tanto no pida perdón y se arrepienta de todas estas obras perversas, este cambio que ahora presume, en realidad es falso. ¿Qué es lo que hace al presumir un cambio, sin arrepentirse de todas estas obras carnales? La Biblia dice, “Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios” (Romanos 2:5). Que no le engañe con la “suavidad” que con su imagen quiere aparentar, habiendo “dureza” en su “corazón no arrepentido”. Él puede suspirar y decir que ha tomado un nuevo camino, cuando la triste realidad es que sigue bajo la ira de Dios a causa de su pecado. El pobre ha cometido el error de aquellos que, por las apariencias, creen andar en un camino recto, engañándose a sí mismos. La Biblia dice, “Hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte” (Proverbios 14:12). Ese camino “parece”, y con su apariencia, ha logrado engañar a muchos. El detractor y falso maestro Fernando Mata, cree que su nueva “apariencia” que proyecta en sus “fotos” tomadas a modo y con buena luz, cree que así anda en los caminos rectos del Señor, cuando la realidad es otra. Si no se arrepiente y pide perdón por los pecados antes mencionados, su camino, es camino de muerte. ¿Algún día tendrá un cambio real? Eso es muy difícil de creer, estando el espíritu de Moab todavía controlando su corazón. La Biblia dice, “Hemos oído la soberbia de Moab, que es muy soberbio, arrogante, orgulloso, altivo y altanero de corazón” (Jeremías 48:29). Estas cosas serán las que tengan cautivo al detractor y falso maestro Fernando Mata, pues por ellas, jamás querrá reconocer, arrepentirse y pedir perdón por los pecados que en la lista hemos indicado, y de aquellos que más adelante estaremos exponiendo.
La nueva imagen del detractor y falso maestro Fernando Mata, no es evidencia de un cambio de mente, no es evidencia de un cambio de corazón, sino de un cambio de comida, de ropa y de imagen; pero nada más. ¿Es bueno lo que está haciendo? ¿Es bueno cambiar de comida? Claro; sin embargo, debemos tener presente que, reglas tales como “no comas esto” o aquello, en verdad tienen una apariencia de sabiduría en una forma autoimpuesta que es en beneficio de la apariencia; sin embargo, no tienen poder para combatir el pecado (cfr. Colosenses 2:22-23). Pablo también dijo al joven Timoteo, que “el ejercicio corporal”, por el cual quizás se busca tener buena salud y buena apariencia física, “para poco es provechoso, pero la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera” (1 Timoteo 4:8). No, no estamos diciendo que sea pecado alimentarse bien y hacer ejercicio, lo que estamos indicando es que los efectos positivos y físicos de dichas disciplinas, no son evidencia de una buena salud espiritual. Por tanto, cuando el detractor nos presume un cambio, su presunción es física, pero no moral, ni espiritual, ni siquiera emocional. Si su cambio fuese el de tener buena salud emocional, o psicológica, entonces dejaría de estar presumiendo sus “estudios”, o sus nuevos “conocimientos”. He trabajado con predicadores que son doctores, o psicólogos, o abogados, que jamás andan presumiendo o evocando sus estudios o conocimientos, a menos que sea absolutamente necesario. Pero, ¿acaso no se da cuenta de que las diversas plataformas en la red que administra el detractor y falso maestro Fernando Mata, son todo un culto a su persona? Todo gira en torno a él y sus “grandes” y “maravillosos logros”. Nadie le puede decir “mi alma” porque pide “matrimonio”. Enmarca con letras grandes si alguien le dice que es un “buen maestro”, o que ha “aprendido” algo de él, y así, lo publica como si fuera el descubrimiento de un nuevo elemento. A pesar de decirse predicador, ni Cristo, ni su palabra son el centro de atención. La condición espiritual es evidentemente patológica, y eso no es nuevo. Tal condición es tan actual como lo fue hace algún tiempo. ¿Recuerda esta imagen, donde echó fuera el nombre de Cristo, al fundar una nueva secta, y donde él se presentó a sí mismo como cabeza, vocero y representante visible de ella?
Además, se nombró a sí mismo “El siervo escogido del Dios Todopoderoso”, siendo “elegido”, según él, desde el vientre de su madre. Hoy en día, y aunque no sabemos si también esto fue predeterminado desde antes de nacer, se identifica a sí mismo como, “El psicólogo”. Escúchelo por usted mismo:
“Hola, ¿qué tal? Los saluda el psicólogo Fernando Mata, desde el Centro de Formación e intervención psicológica”
¿Escuchó con atención? Ahora es “el psicólogo”, y además, fundador, desde luego, de lo que él mismo llama, “Centro de formación e intervención psicológica”. El detractor no tiene ningún empacho en formar una “institución” de esa naturaleza, y al mismo tiempo, estar incrustada en el canal de la institución sectaria desde la que imparte su falso evangelio, es decir, la denominada: “Estudios Bíblicos Iglesia de Cristo”. Dos instituciones, una religiosa y la otra secular, donde la primera da a conocer a la segunda. Es interesante que el detractor critica y juzga a hermanos e iglesias por practicar el institucionalismo, y al mismo tiempo, él se siente con la libertad de crear una institución religiosa que funciona a nombre de lo que él llama, “Iglesia de Cristo”. Pero, en lugar de arrepentirse de este error, el pobre lo acrecienta, erigiendo otra institución que funciona bajo el auspicio de la primera. ¿Quién, en su sano juicio, puede decir que este es un cambio adecuado?
La nueva imagen del detractor y falso maestro Fernando Mata, solamente revela su hipocresía y su incongruencia. Por un lado, estuvo diciendo que celebrar la navidad es pecado, y que tener comunión con Wayne Partain, o Gardner Hall, también es pecado. Sin embargo, él estuvo pronto para señalar a hermanos que no representaban ningún beneficio para él, pero no así para quienes potencialmente pueden darle beneficios, y sobre todo, económicos. Tal es caso de su comunión con Rubén Dávila. Mire cómo se emociona por haber hablado con él; no obstante, al mismo tiempo no presume haberle advertido que lo expondrá con su fotografía y la de su esposa, si no se arrepiente de celebrar la navidad y de tener comunión con Wayne Partain y Gardner Hall. He aquí la evidencia:
La cuestión no es que ponga atención en ataques que le hagan. Al menos, por nuestra parte, no es ningún ataque el que le hacemos, sino una defensa ante los ataques que él nos ha hecho, y de los que no se ha arrepentido; por el contrario, los mantiene vivos en sus redes sociales. El hecho es que, el detractor y falso maestro Fernando Mata, jamás ha expuesto a Rubén Dávila como ha expuesto a otros por estar en algún pecado. Contra otros, hizo videos, escritos y los expuso con todo y fotografía; pero no así a Rubén Dávila, quien celebra la navidad y tiene comunión con Wayne Partain y Gardner Hall. ¿Por qué esa doble moral? ¿Por qué esa parcialidad? Porque es un hipócrita, y porque Rubén Dávila bien puede ser una fuente de dólares, que es lo que últimamente el detractor anda buscando con toda desesperación, al grado de haber llegado al punto de “monetizar sus videos de YouTube”. Y aquí compartimos la evidencia, para que no se diga que estamos mintiendo.
Sobre esto, el mismo Fernando Pava, un discípulo del detractor y falso maestro Fernando Mata, dice:
Fuente: Indignación por mercadería con la Palabra de Dios.
Cabe señalar que nosotros fuimos los primeros en denunciar “la mercadería” del detractor y falso maestro Fernando Mata (Ver, “Mata pide plata“). Fuimos los primeros en denunciar su “contrabando”, fuimos los primeros en denunciar su pecado, y fuimos los únicos en refutar sus argumentos para justificar ese pecado; pero, como vemos, el mismo Fernando Pava, deja a su maestro y guía espiritual, como un mercader del evangelio, como uno que no habla conforme a las palabras de Dios, como un completo sectario y a la misma altura de los que cobran diezmos. ¿Cuántos creen que ese cambio es bueno?
El cambio de imagen del detractor, lo ha llevado a seguir alejándose más de la palabra de Dios y a ser mucho más deshonesto de lo que ya era. Por ejemplo, en un discurso publicado el domingo 3 de julio, 2022, hizo una apología de la venganza personal. Enseñó que es bíblicamente correcto, y natural, que el cristiano tome venganza con sus propias manos. De hecho, fue esa la razón por la que dijo que estaría monetizando sus videos en YouTube. Escúchelo por usted mismo:
¿Qué le parece? En primer lugar, él dice que su “enseñanza” está condicionada a que no lo ataquen. ¡Allí vemos su falta de buen juicio! Allí vemos su hambre de reconocimiento, de halagos, de palmadas en la espalda, de expresiones de aprobación y amor incondicional. Eso es todo lo que él quiere. Este es otro ejemplo de un psicólogo con serios problemas de autoestima. No sucede así con predicadores sanos en la fe que han sido restaurados por el poder del evangelio (cfr. Romanos 1:16). No, yo no estoy diciendo que nuestra historia de vida haya sido la mejor, pues muchos de quienes predicamos el evangelio provenimos de familias disfuncionales, con violencia intrafamiliar, con carencias de amor y protección, con abusos, con experiencia en la delincuencia, con la ausencia de un padre, etc.; sin embargo, y gracias al poder del evangelio, nos hemos librado de tener “una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen” (Romanos 1:28), no permitimos que nos controlen enojos, resentimientos o afectaciones emocionales por desagradables vivencias en la niñez, o en la juventud, o en el presente. A diferencia del detractor, quien vive “vanamente hinchado por su propia mente carnal” (Colosenses 2:18), pues “su mente y su conciencia están corrompidas” (Tito 1:5), el sano predicador de Cristo ha experimentado una “renovación”, siendo así “diferentes en cuanto a su conducta y forma de pensar” (Romanos 12:1/NBD). No recurrimos a la psicología, sino a la palabra de Dios para restaurar también nuestras emociones (cfr. Filipenses 2:2; 4:8). No obstante, ahora el detractor y falso maestro, engañándose a sí mismo, y con él, a quienes creen sus ocurrencias, dice que la psicología es lo que el hombre necesita para restaurar su vida y sus emociones. Según él, el evangelio no tiene ese poder. Si él se promociona ahora, como una persona madura y cambiada, fue gracias a la psicología y no al poder de Dios. Mis hermanos y amigos, es en esto donde nos diferenciamos los predicadores del evangelio y los psicólogos. Estos les dicen a sus pacientes que ellos son buenos, y que la razón por la cual viven mal, es debido a la sociedad o a los errores de sus padres. Por eso, cuando el psicólogo está tratando a una persona que se comporta de manera inapropiada, él encuentra la fuente del dolor y pretende eliminarlo. La Escritura, enseña, sin embargo, que las personas se portan mal debido al pecado (cfr. Salmo 51:5; 59:12; Proverbios 15:22). La Biblia enseña absolutos. Existe lo malo y lo bueno en este mundo. La psicología enseña el relativismo. Yo puedo tener, mis propios puntos de vista y usted puede tener los suyos; pero por todos los medios, no debo imponer mis valores sobre los suyos. Las implicaciones para la consejería son obvias. La Psicología enseña que el individuo tiene las respuestas dentro de sí mismo. El trabajo del consejero es ayudar al aconsejado a descubrir estas respuestas. La Biblia dice que las respuestas son encontradas dentro de la Escritura según las ha revelado Dios. La mayoría de los métodos de la psicología enseñan que la clave para los problemas personales yace en algún momento en nuestro pasado. No obstante, Dios puede ordenar que dejemos de estar enojados o ansiosos inmediatamente, sin buscar causas de raíz basadas en el pasado.
Para mostrar un ejemplo en el discurso del detractor y falso maestro Fernando Mata, de cómo la psicología lo ha arrastrado fuera de la voluntad de Dios, es lo que dice aquí en el extracto de su sermón que antes hemos compartido. Él dice, “¿Sabe qué hice? Me vengué. A partir de hoy, todos mis videos de YouTube van a estar monetizados”. De hecho, en todo su discurso, él hace una defensa de la venganza en mano propia. Pero, ¿no cita la Biblia? Sí, pero increíblemente la ignora por completo. Por ejemplo, él cita Apocalipsis 6:10, donde leemos las palabras de quienes habían muerto por Cristo, diciendo, “¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra?”. ¿Leyó con atención? Este texto no dice que podemos vengarnos por cuenta propia. Es Dios quien juzgará, y es Dios quien vengará la sangre de ellos. Pero, el texto no autoriza al cristiano a tomar venganza por sus propias manos. Pablo también dice, “No os venguéis vosotros mismos” (Romanos 12:19). ¿Lo ve? El detractor y falso maestro Fernando Mata se ha vengado, a pesar de que Dios dice que no lo haga. El detractor ha seguido el camino de la psicología, y así, ha tomado un camino contrario a la voluntad de Dios. Fernando Mata dice que usted puede tomar venganza, pero Dios dice que no. Fernando Mata dice que es natural, que es normal y que es necesario que tomemos venganza con nuestras propias manos o con nuestros propios medios; no obstante, Dios dice que no, que nosotros no tenemos ningún derecho de hacerlo, pues la venganza es una obra exclusiva de Dios (Véase: “No os venguéis vosotros mismos”, video 1 y video 2).
Lo interesante, es que a pesar de venderse como un hombre honesto, él ya eliminó de sus redes sociales su anti bíblico discurso sobre la venganza. Entre sus mismos contactos han notado que ya no está disponible. Está el de “Basura humana”, pero no el de “la venganza”. Esto es interesante, pues con la mano en la cintura me acusó falsamente de yo haber eliminado un documento de mi sitio web (ver la entrada aquí); ¿y qué es lo que hizo él con su anti bíblico discurso? ¡Eliminó el video para que nadie pueda seguir viendo su garrafal y estrepitoso tropiezo! El que anda en el error siempre es culpable de lo que acusa.
Entonces, ¿es el cambio de imagen, la evidencia de un verdadero arrepentimiento? No, no lo es. Es cierto que todo arrepentimiento implica un cambio, pero no es verdad que todo cambio implica arrepentimiento. Hay cambios para bien, y hay cambios para mal, ¿verdad? Bueno, el cambio que el detractor y falso maestro Fernando Mata ha tomado, es nada más un cambio de imagen, un cambio que satisface a sus intereses, un cambio que satisface su vanidad, un cambio superficial. Alguien dijo que las apariencias engañan, y si el detractor se ha engañado a sí mismo con este aparente cambio, sea usted sabio y no se deje arrastrar por ese error, teniendo comunión con él, participando así de sus pecados (cfr. Efesios 5:11; 2 Juan 10-11).