Según la doctrina de la “no suficiencia del plan de salvación” que predican algunos hermanos, es decir, que no es suficiente con que el pecador oiga las enseñanzas básicas del evangelio, que no basta con que crea de todo corazón que es pecador y que solo Jesús puede salvarle, que no basta con que se arrepienta de sus pecados pasados, que no basta con que confiese que Jesucristo es Dios el Hijo y que no basta con que se bautice para perdón de pecados; algunos de ellos enseñan y otros insinúan o aluden que otra persona en el bautismo, además de Cristo, hace que el pecador llegue a ser salvo, esto es, el bautizador cristiano. Sin embargo, ¿esta doctrina del bautizador de ciertas características como una persona que salva es una doctrina fundamentada en las Escrituras apostólicas? ¡En ninguna manera! Y le invito, estimado lector, a que considere los siguientes puntos que demuestran que constituir y añadir al bautizador como una persona salvífica o esencial para hacer salvo al pecador en el bautismo es una falsa doctrina. Leer el artículo en PDF.